La
bomba del 17 de septiembre de 2012
ha sido la dimisión inesperada de Esperanza Aguirre como
presidenta de la Comunidad de Madrid.
Ahora, se disparan las
especulaciones y se apuntan los motivos personales como los causantes que le
han llevado a la dimisión. Siempre hay motivos personales: estoy harto del
partido, de algunos compañeros, de la presión de la calle, del deterioro de la
Comunidad…claro.
Seguramente no habrá sido
una única causa sino más bien un cúmulo de ellas.
No voy a ser yo, el que
ahora que se va diga ¡Qué lástima! Pero sí que la critico por abandonar la nave
en medio de la tormenta.
Y a pesar de usar teleEspe
(Telemadrid) para descalificar a sus adversarios, y de tapar su mala gestión al
masacrar los servicios públicos, al abandonar la ley de dependencia, al ocultar
el déficit y mentir, dando unas cifras que se quedaban en la mitad, son ya
muchos los madrileños que se han dado cuenta de la verdadera cara de esta
liberal que nos ha dejado una comunidad echa unos zorros. Su populismo ya no
hacía gracia ni a los suyos.
En 9 años de gobierno ha
conseguido desmontar los servicios públicos madrileños, otrora ejemplo de buen
hacer; el paro en Madrid ha aumentado más en porcentaje que en la mayoría de
las regiones españolas. Los impuestos han crecido pero solo a las clases medias
y trabajadoras. Ha manipulado la información. Ha amenazado a propios y
extraños. Ha permitido el expolio de Bankia y la desaparición de Caja Madrid,
con 300 años de historia. Ha tapado el Gürtel en Madrid (corrupción del PP)
todo lo que ha podido, veremos si es suficiente.
Madrid está muchísimo peor
tras su mandato. Como no puede echar la culpa a otros como hizo con Zapatero,
su orgullo le impide reconocer sus propios errores, que han sido muchos y se
va.
Pero lo que no voy a
perdonar nunca a esta señora, es del “golpe de Estado” que realizó en 2003,
después de que la alianza del PSOE con IU hubiera permitido a Rafael Simancas,
gobernar la Comunidad de Madrid.
No sé si algún día se podrá
demostrar lo que la gente sabe. En todo caso el mal a la sociedad madrileña ya
está hecho.
Es el 2º dirigente de Madrid
que abandona, dejando el carro entornado a los madrileños, el otro fue Gallardón,
que nos dejó un deuda de 7 millardos de euros.
Como los que se quedan: de
alcaldesa y de presidente, no fueron votados en el primer lugar de la lista,
pido unas elecciones anticipadas en el ayuntamiento de Madrid y en la Comunidad.
Decididamente no estoy
triste por la marcha de Aguirre.